sábado, 3 de octubre de 2015

DE CIERTO TE DIGO HOY ESTARÁS CONMIGO EN EL PARAISO



39 Uno de los criminales colgados junto a él se burló: «¿Así que eres el Mesías? Demuéstralo salvándote a ti mismo, ¡y a nosotros también!».
40 Pero el otro criminal protestó: «¿Ni siquiera temes a Dios ahora que estás condenado a muerte? 41 Nosotros merecemos morir por nuestros crímenes, pero este hombre no ha hecho nada malo». 

42 Luego dijo:
—Jesús, acuérdate de mí cuando vengas en tu reino.
43 Jesús respondió:
—Te aseguro que hoy estarás conmigo en el paraíso. (Lucas 23:39-43)NTV



¿Alguna vez sentiste que tu vida se arruinaba por haber hecho algo vergonzoso o, incluso, delictivo… y después te despertaste y te diste cuenta de que estabas soñando? Pero ¿qué pasaría si no fuera solamente una pesadilla? ¿Y si la situación fuera real, para ti o un ser querido?

Esto fue lo que sucedió en la novela de George MacDonald, The Curate´s Awakening [El despertar del párroco], donde el ministro descubre que ha estado hablando en nombre de un Dios en quien ni siquiera sabe si cree. Tiempo después, lo llaman para que hable con un joven que está volviéndose loco y a punto de morir, torturado por un asesinato que cometió.

En la reveladora lucha que le sigue, el párroco descubre lo que todos necesitamos comprender: el alivio de despertarse tras una pesadilla no se compara en absoluto con tomar conciencia de la realidad del perdón de Dios, el cual, alguna vez, pensamos que era demasiado bueno para que fuera cierto.

¿Dónde hallaremos la misericordia que necesitamos? En Jesús, quien, desde su propia cruz, le dijo a un criminal que le rogó que lo ayudara: «… hoy estarás conmigo en el paraíso» (Lucas 23:43).

Padre celestial, ayúdanos a creer que nuestro perdón es tan cierto como el precio que pagaste para rescatarnos.

Somos salvos por la gracia de Dios, no por mérito personal. 

Fuente:nuestropandiario.com

viernes, 2 de octubre de 2015

LA PROVISIÓN DE DIOS





15 Su provisión bendeciré en abundancia; de pan saciaré a sus pobres (Salmos 132:15)

Cuando nos encontramos en tiempos de escacez es muy fácil desanimarnos, desesperarnos o hasta dudar de la provisión de Dios; pero estas promesas nos ayudarán a seguir confiando en El.

Y llamo Abraham el hombre de aquel lugar, Jehová proveerá. Por tanto se dice hoy: en el monte de Jehova será provisto. Génesis 22:14



Te abrirá Jehová su buen tesoro, el cielo, para enviar la lluvia a tu tierra en su tiempo, para bendecir toda obra de tus manos. Y prestaras a muchas naciones, y tú no pedirás prestado. Deuteronomio 28:12



Entonces Jehová respondió a Moisés: ¿A caso se ha acortado la mano de Jehová? Ahora veras si se cumple mi palabra, o no. Números 11:23


 
Porque Jehová Dios de Israel ha dicho así: la harina de la tinaja no escaseara, ni el aceite de la vasija disminuirá, hasta el día en que Jehová haga llover sobre la faz de la tierra. 1Reyes 17:14


Los sustentaste cuarenta años en el desierto; de ninguna cosa tuvieron necesidad; sus vestidos no se envejecieron, ni se hincharon sus pies. Nehemías 9:21


Que pone a los humildes en altura, y a los enlutados levanta a seguridad. Job 5:11


Vida y misericordia me concediste, y tu cuidado guardo mi espíritu. Job 10:12


Porque no para siempre será olvidado el menesteroso, ni la esperanza de los pobres perecerá perpetuamente. Salmo 9:18


Jehová es mi pastor; nada me faltara. Salmo 23:1


Temed a Jehová, vosotros sus santos, pues nada falta a los que le temen. Los leoncillos necesitan, y tienen hambre; pero los que buscan a Jehová no tendrán falta de ningún bien. Salmo 34:9-10


Todos mis huesos dirán: Jehová, ¿Quién como tú, que libras al afligido del más fuerte que él, y al pobre y menesteroso del que le despoja? Salmo 35:10


Mejor es lo poco del justo que las riquezas de muchos pecadores. Porque los brazos de los impíos serán quebrados; mas el que sostiene a los justos es Jehová… no serán avergonzados en el mal tiempo, y en los días de hambre serán saciados… joven fui, y he envejecido, y no he visto justo desamparado, ni su descendencia que mendigue pan. Salmo 37:16-17,19, 25


Visitas la tierra, y la riegas; en gran manera la enriqueces; con el rio de Dios, llenos de aguas, preparas el grano de ellos, cuando así la dispones. Salmo 65:9


Lo verán los oprimidos, y se gozaran. Buscad a Dios, y vivirá vuestro corazón. Salmo 69:32


Porque él librara al menesteroso que clamare, y al afligido quien no tuviere quien le socorra. Salmo 72:12


Extendió una nube por cubierta, y fuego para alumbrar la noche. Pidieron, he hizo venir codornices; y los sacio de pan del cielo. Abrió la peña, y fluyeron aguas; corrieron por los sequedales como un rio. Salmo 105:39-41


Ha dado alimento a los que le temen; para siempre se acordara de su pacto. Salmo 111:5


Redención ha enviado a su pueblo; para siempre ha ordenado a su pacto; santo y temible su nombre. Salmo 111:9


Yo sé que Jehová tomara a su cargo la causa del afligido, y el derecho de los necesitados. Salmo 140:12


Los ojos de todos esperan en ti y tu les das su comida a su tiempo. Abre tu mano, y colmas de bendición a todo ser viviente. Salmo 145:15-16


Jehová no dejara padecer hambre al justo; más la inequidad la alzara a los impíos. Proverbios 10:3


Sino que juzgara con justicia a los pobres, y argüirá con equidad por los mansos de la tierra; y herida la tierra con la vara de su boca, y con el espíritu de sus labios matara al impío. Isaías 11:4


Y los primogénitos de los pobres serán apacentados, y los menesterosos se acostaran confiados. Isaías 14:30 a


Porque fuiste fortaleza al pobre, fortaleza al menesteroso, en su aflicción, refugio contra el turbión, sombra contra el calor; porque el ímpetu de los violentos es como turbión contra el muro. Isaías 25:4


He visto sus caminos; pero le sanare y le pastoreare, y le daré consuelo a él y a sus enlutados. Isaías 57:18


Entonces los humildes crecerán e alegría en Jehová, y aun los más pobres de los hombres se gozaran en el santo de Israel. Isaías 29:19





He aquí que yo hago cosa nueva; pronto saldrá a luz; ¿No la conoceréis? Otra vez abriré camino en el desierto, y rio en la soledad. Isaías 43:19


Jehová te pastoreara siempre, y en las sequias saciara tu alma, y dará vigor a tus huesos; y serás como huerto de riego, y como manantial de aguas, cuyas aguas nunca faltan. Isaías 58:11


Mía es la plata, y mío es el oro, dice Jehová de los ejércitos. Hageo 2:8

Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas. Mateo 6:33

Mi Dios, pues, suplirá todo lo que os falta conforme sus riquezas en gloria en Cristo Jesús. Filipenses 4:19



RECORDAR COMO PROVEYÓ DIOS AYER, NOS DA ESPERANZA PARA EL FUTURO.

DIOS SIEMPRE SUSTENTA A SUS HIJOS

jueves, 1 de octubre de 2015

QUE TODA LA CREACIÓN ALABE A DIOS






5 Que toda cosa creada alabe al Señor,  pues él dio la orden y todo cobró vida. (salmos 148:5)

Ayer navegando por internet encontré el video de una tortuga bebé que me conmovió mucho, ya  que le estaban sacando de la naríz una especie de clavo o tornillo que  había inhalado y que  estaba obstruyendo su respiración, y la pequeña tortuga sangraba y gemía de dolor,  al final del video salía un texto que decía solo los seres humanos dañamos nuestro planeta.

Por un momento me quedé meditando en esto y después comencé a orar y agradecer a Dios por su hermosa creación y por permitirnos disfrutar de ella y también a pedir perdón por la inconsciencia de muchos hombres que la dañan.

Hoy al hacer mi devocional el Señor me contestó con el salmo 148.

 

Salmo 148

¡Alabado sea el Señor!
¡Alaben al Señor desde los cielos!
    ¡Alábenlo desde el firmamento!
¡Alábenlo, todos sus ángeles!
    ¡Alábenlo, todos los ejércitos celestiales!
¡Alábenlo, sol y luna!
    ¡Alábenlo, todas las estrellas brillantes!
¡Alábenlo, los altos cielos!
    ¡Alábenlo, los vapores que están mucho más allá de las nubes!
Que toda cosa creada alabe al Señor,
    pues él dio la orden y todo cobró vida.
Puso todo lo creado en su lugar por siempre y para siempre.
    Su decreto jamás será revocado.
Alaben al Señor desde la tierra,
    ustedes, criaturas de las profundidades del océano,
el fuego y el granizo, la nieve y las nubes,[a]
    el viento y el clima que le obedecen,
ustedes, las montañas y todas las colinas,
    los árboles frutales y los cedros,
10 los animales salvajes y todo el ganado,
    los animales pequeños que corren por el suelo y las aves,
11 los reyes de la tierra y toda la gente,
    los gobernantes y los jueces de la tierra,
12 los muchachos y las jovencitas,
    los ancianos y los niños.
13 Que todos alaben el nombre del Señor,
    porque su nombre es muy grande;
    ¡su gloria está por encima de la tierra y el cielo!
14 Dios hizo fuerte a su pueblo
    y honró a sus fieles:
    los del pueblo de Israel que están cerca de él.
¡Alabado sea el Señor!

Hermanos y amigos todos alabemos al SEÑOR NUESTRO DIOS por su hermosa creación y cuidemos de ella.



 

miércoles, 30 de septiembre de 2015

EL SEÑOR TU DIOS ESTÁ EN MEDIO DE TI, EL ES PODEROSO Y TE SALVARÁ





El Señor tu Dios está en medio de ti; ¡él es poderoso, y te salvará! El Señor estará contento de ti. Con su amor te dará nueva vida; en su alegría cantará (Sofonías 3:17) NTV




El profeta Sofonías muestra que la rebelión contra Dios trae consecuencias sobre el ser humano. Por el gran amor de Dios, después de su juicio, llegará el día de consolación para aquellos que pacientemente esperan en el Señor.

Los jóvenes tendrán la oportunidad de entender el día del Señor como un tiempo de esperanza en Dios y en la restauración del ser humano. Su pueblo se llenará de gozo y alegría porque Dios estará en medio de él para restaurarlo.

Tenemos la alternativa de vivir provechosamente esperando con gozo el tiempo en que Dios se manifestará o podemos vivir en una forma mediocre. La mediocridad hace que nos alejemos de Dios.

La esperanza nos hace vivir con propósito y nos lleva al crecimiento en nuestra relación diaria con Dios.

Fuente:coverchurch.org

martes, 29 de septiembre de 2015

SOMOS HIJOS DE DIOS





16 Pues su Espíritu se une a nuestro espíritu para confirmar que somos hijos de Dios. 
 17 Así que como somos sus hijos, también somos sus herederos. De hecho, somos herederos junto con Cristo de la gloria de Dios; pero si vamos a participar de su gloria, también debemos participar de su sufrimiento.(Romanos 8:16-17) NTV



El otro día, una amiga me detuvo para darme una noticia emocionante: pasó diez minutos contándome cómo había dado el primer paso su sobrino de un año.

 ¡Podía caminar! Después, pensé en lo raro que le hubiese sonado eso a algún entrometido que estuviera escuchándonos. Casi todos pueden caminar. ¿Qué tiene de extraordinario? 

Comprendí que la infancia brinda una especie de singularidad que prácticamente desaparece después de cierta edad. Pensar en cómo tratamos a los niños amplió mi perspectiva en cuanto a que Dios haya elegido la imagen de «hijos» para describir nuestra relación con Él.

 El Nuevo Testamento afirma que somos hijos de Dios, con todos los derechos y privilegios de los herederos legales (Romanos 8:16-17). Se nos dice que Jesús, el «unigénito» Hijo de Dios, vino para hacer posible que fuéramos adoptados como hijos e hijas en su familia.

Me imagino que Dios observa cada paso tembloroso con que avanzo en mi «andar» espiritual con el mismo entusiasmo que un padre terrenal mira a su hijo que da el primer paso.

Cuando los secretos del universo finalmente se revelen, quizá entendamos que Dios nos ha concedido estos momentos de singularidad para que descubramos su amor infinito, del cual nuestras experiencias solo nos ofrecen simples atisbos.

Padre, que mi andar te produzca deleite.

Hay alguien que te ama ES DIOS.